Hace
diez años, el mapa de Japón era un poco diferente.
Hasta
hace una década, la región sur de Kantou podía presumir de un terreno más
amplio de tierra. Sin embargo, hoy en día, una gran abolladura con forma
redonda lo había estropeado, donde una parte considerable se hundió en el mar
formando un cráter.
“Parece
que fue lo que el poder del ex Rey Rojo hizo”
Eso
fue algo que había averiguado por Kusanagi.
Al
parecer Kagutsu había sido el nombre del anterior Rey Rojo. El nombre del Rey
antes de Suoh – un rey que, diez años atrás, se había autodestruido creando el
cráter.
Y
así, se dice que el cráter es la forma que toma la caída de un rey.
“Mmm”,
pensó Suoh.
Sentía
que no sería tan malo.
Si
tuvieras que unirte a ti mismo con cadenas para poder vivir en este mundo
pequeño y estrecho, entonces él honestamente encontró abandonarse a sí mismo
como un impulso fuerte, un abrumador impulso quemando todo reduciéndolo a
cenizas, conocer tu propio final era una idea más emocionante.
Y
fue precisamente porque pensaba eso, que su estómago se revolvió.
No hay comentarios:
Publicar un comentario